Los visitantes de Cullera tendrán un año más una cita con el patrimonio histórico de la localidad costera. El Ayuntamiento, a través de las concejalías de Turismo y Patrimonio Histórico, ha puesto en marcha este verano las rutas teatralizadas que ofrecen al público la posibilidad de conocer la historia local a través de dos rutas: la islámica y la medieval.
Turistas y visitantes disfrutan de esta opción alternativa a los días de playa, que se posiciona como una de las actividades de ocio preferidas por su gran riqueza cultural.
El recorrido empieza en el centro histórico de la ciudad, con la ruta islámica, que tiene como punto de partida la calle del mar. Durante aproximadamente 80 minutos, actores ataviados con la vestimenta de la época, descubren a los visitantes los rincones más curiosos y misteriosos de la Cullera que en aquella época fue uno de los asentamientos musulmanes del mediterráneo. La ruta transcurre por el peculiar Barreig del Pou y sus calles estrechas de arquitectura morisca hasta llegar a los torreones restaurados de la segunda albacara.
Por otra parte, la ruta medieval tiene lugar los jueves a las ocho de la tarde y adentra a los visitantes en un apasionante viaje por la villa medieval de Cullera, todo ello en más de una hora de duración. Diversos hechos de armas acontecieron en Cullera durante este período, entre los cuales destaca la toma de la fortaleza por las tropas de Pedro de Castilla en sus luchas contra Pedro de Aragón.
Desde Sucro o Sicania, pasando por Colla-Aèria tal y como la designaban en su colonización musulmana hasta llegar al nombre definitivo, Cullera, ha sido poblada por numerosas colonias y etnias.
A lo largo de este recorrido, los visitantes serán testigos de cada acto, observando a los actores que escenifican como era la Cullera del siglo XVI, saqueada por los numerosos ataques del pirata Dragut, lo que provocó que los vecinos de la ciudad levantaran la muralla para proteger su comunidad.
Prueba de ello está en la popular 'Cova del Dragut' que muestra una exposición temática sobre la piratería mediterránea en el siglo XVI y acoge a sus visitantes entre recreaciones de las invasiones de los corsarios berberiscos a la población.
En la ruta los visitantes conocen las costumbres y las raíces que convirtieron a Cullera en una de las ciudades mediterráneas más importantes del medievo.
Para apuntarse a esta actividad incluida en el proyecto del Plan de Dinamización del Producto Turístico de Cullera, hay que formalizar una reserva en la oficina de Tourist Info.
Hasta el 13 de septiembre, los amantes de la historia disfrutarán cada martes y jueves del pasado de Cullera, una localidad que actualmente es repoblada de una forma bien distinta, la del turismo que cada verano opta por las actividades, el bienestar y la playa de la zona más recreativa de la Ribera.
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