Condenan a un vecino de Cullera por un delito de lesiones contra un inmigrante subsahariano que pretendía abusar de una menor

David Merino, vecino  de Cullera, ha denunciado a la jueza del juzgado número 1 de Sueca, Clara España Narbona, por dictar una condena en su contra luego de haber evitado que una amiga suya de origen británico, Alexandra Rose Mayger, fuese víctima de una agresión sexual dentro de su propio domicilio a manos de Mokhtari Diakite, un inmigrante subsahariano. Según la versión dada  por Merino, los hechos prueban la instrumentalización de los casos de violencia de género por parte de las autoridades españoles para según qué casos. Lo insólito de este caso es que, según la versión del denunciante, tras impedir que se consumara el ataque sexual fue denunciado por el propio Mokhtari en el cuartel de la Guardia Civil. El inmigrante dijo que había sido golpeado por el de Cullera y presentó como prueba unas magulladuras en su rostro que, a decir de nuestra fuente, fueron provocadas por la menor cuando trataba de defenderse de su agresor.
Celebrado el juicio por lesiones y siempre según la versión de Merino, la jueza de Sueca impidió a la joven británica que prestara declaración para que aclarara los hechos. En su opinión, este hecho prueba la instrumentalización de los casos de violencia de género por parte de las autoridades españoles para según qué casos.
En la resolución judicial del caso, la jueza absolvió al supuesto agresor y condenó sin embargo a Merino al pago de una multa por un delito de lesiones. Las dudas se ciernen sobre el por qué de la negativa de la jueza a que la menor aclarara lo sucedido.
Jovel denunció a la jueza España Narbona por un presunto delito de prevaricación ante el Tribunal Superior de Justicia de Valencia. El alto tribunal no apreció indicios irregulares en su actuación.
Nuestro interlocutor declara por último que ha puesto los hechos referidos en conocimiento del Consulado del Reino Unido en Valencia para que “tome cartas en el asunto”.
Bodas de conveniencia
No es la primera vez que David Merino denuncia la supuesta connivencia entre autoridades judiciales e inmigrantes residentes en la zona. Hace unos meses denunció al juez de paz y encargado del Registro Civil de Cullera, Pedro Monreal Mengual, por los presuntos delitos de prevaricación, cohecho, obstrucción a la justicia y encubrimiento.
En manifestaciones hechas a AD, David acusó al juez de Cullera de rechazar elevar a juicio una denuncia presentada en el juzgado de Cullera, el 22 de diciembre de 2009, donde denunció amenazas de muerte y un allanamiento de su domicilio privado, luego de haber puesto en conocimiento de la opinión pública un matrimonio de conveniencia celebrado por Pedro Monreal entre una colombiana y un uruguayo nacionalizado español (ambos en la imagen) previo pago de siete mil euros. El denunciante señaló que el funcionario permitió que el novio acudiera a la boda en pantalón corta.
“Este funcionario retrasó el juicio por amenazas para que los involucrados en el matrimonio de convinencia obtuvieran la tarjeta comunitaria y no se investigara el casamiento insólito de un extranjero que incluso se presentó en el juzgado vestido de manera tan informal”, detalló a nuestra redacción.
Aseguró asimismo que la mujer colombiana admitió haber invertido miles de euros en la boda para obtener la regularización documental en nuestro país tanto ella como su hijo.
Por otro lado, el denunciante acusó al juez Monreal de “un supuesto delito de encubrimiento por auxiliar a los autores del fraude ocultando la denuncia  y no llamando a los testigos de las amenazas”. Dicho proceder habría demostrado a su juicio que “las amenazas fueron para cubrir la boda de conveniencia hasta que la autora del fraude recibiera la documentación comunitaria”.
Merino denunció por último la existencia en nuestra país de “una red de matrimonios de conveniencia, varios de los cuales las ha realizado el mismo juez de Cullera entre españoles y nacionales de otros paises”.